Vivimos en un instante en que prácticamente cualquier persona tiene el poder y la capacidad de propagar información de forma masiva. Redes sociales, weblogs y aplicaciones de correo brindan un potente altífono a través del que contar lo que uno desee. Aunque esto de manera frecuente es positivísimo –por la democratización de la información y la libertad de expresión–, asimismo supone sus peligros.
Dichos peligros pasan de forma directa por la desinformación, los bulos y las fake news. Se trata de informaciones falsas o manipuladas, cuyo objetivo acostumbra a ser ocasionar revuelo, indignación o alarma entre los receptores.
Los riesgos de las fake news son muchos. Eminentemente dan sitio a una población desinformada o mal informada, con las consecuencias que ello acarrea, sobre todo tratándose de temas que influyen de manera directa en la seguridad o bienestar de las personas. Asimismo daña la verosimilitud de las noticias veraces y diluye la línea que aparta lo que es real de lo que no.
Para identificarlas, lo más esencial es hacer uso del los pies en el suelo y el escepticismo. Mas siguiendo una serie de consejos prácticos vamos a poder advertir una fake new de forma sencilla y veloz.
Asiste a canales de información oficiales y fiables
Intenta asistir a medios fiables y de prestigio, como a canales de organismos oficiales. No te fíes de la información que se difunde por perfiles de redes sociales no verificados, con nombres extraños o pocos seguidores. Fíjate asimismo en la dirección web del medio y sospecha si tiene un nombre poco conocido.
Busca fuentes y contrasta la información
El periodismo de calidad se fundamenta en las fuentes. Busca la convocatoria del origen de la información en el texto. Si no aparecen menciones ni referencias a la raíz de esos datos o aseveraciones, es un rastro de que podemos estar frente a una información falsa. Por poner un ejemplo, caso de que apelen a estudios científicos, lo común es que aparezca un link para preguntar el original. También, consulta la información en diferentes medios y plataformas. Así contrastarás su veracidad.
Evita el clickbait
El clickbait hace referencia a titulares escandalosos y sensacionalistas que tienen por objeto llamar tu atención a fin de que accedas a un link, si bien entonces el contenido apenas tenga relación con el título. Escapa de expresiones atractivas que solo deseen crear alarmismo.
Fíjate en la redacción de la nueva
El estilo de redacción y gramática del texto son una pista clara. Si es muy informal o aun vulgar, omite el contexto de la información, hay faltas de ortografía o erratas, no te fíes.
Cuidado con fotografías y vídeos
Finalmente, afina tu vista en las fotografías y vídeos, puesto que son susceptibles de retocarse y falsificarse. Si una imagen está muy turbia, semeja poco verosímil, no es clara en lo que se refiere a su contenido o apenas ten relación con la nueva, probablemente sea un bulo.